domingo, 26 de octubre de 2014

Baile



Lo mueves exquisito, te fundes entre los claroscuros de la habitación. No sé sigues a la música o es la música ls que quiere poseer tu cuerpo, tanto cómo yo lo deseo. Bailas con energía, agitas tus caderas y yo imagino tu pubis, tu sexo húmedo. Siempre en tu baile, tan cercano pero tan ajeno. Mi cuerpo hierve. Escucho la música, pienso en tu respiración agitada, en tus pechos inchandose cada vez que inhalas y exhalas. En todos tus movimientos tan sensuales, eróticos. Deseo bajar las malditas escaleras y unirme a tu baile, arrinconar tu cuerpo contra la pared y mi propio cuerpo. Quiero deshacer tu vestido a besos, a caricias, a lámidas. Quiero fundirme con tu danza y a la vez enseñarte una danza antigua pero a la vez nueva cada vez que los cuerpos de los amantes se poseen. Movimientos rápidos, lentos, rígidos, suaves, sudor, música...

Tengo tantas ganas de tu baile, de verte, de observar ese baile prohibido a mis ojos. Sé que si bajo esas malditas escaleras a mirarte, dejarás de bailar, sólo me verás y me darás una sonrisa. Y yo quiero tu sexo. Sólo aumentas mi deseo...

17/10/14

(R)

No hay comentarios.:

Publicar un comentario